El perdonar es muy importante si tú quieres vivir una vida extraordinaria. Me he encontrado con muchas personas atrapadas en sus culpas, pesares y en sus rencores, muchos de ellos queriendo poder perdonar pero “no pueden”, están luchando consigo mismo, y pasa porque sus expectativas son equivocadas acerca del perdón.

 

Es cierto que la vida no es justa, que hay gente que lastima, que te han hecho daño y que no merecen tú perdón. Pero, ¿Será eso lo que Dios quiere para tu vida? ¿Será que el quiere que vivas amargado?

 

Entiende que el rencor no es un sentimiento agradable. Cada vez que piensas en la persona o en la circunstancia que lo provocó, vuelves a experimentar todas esas sensaciones desagradables como: ira, impotencia, frustración, dolor, ansiedad… todo eso es basura toxica que te causa estragos físicos en tu salud y emocional en tu mente.

 

Pero si Dios no quiere que viva amargado, ¿Qué hago con esas heridas? ¿Cómo saco este rencor? ¿Cómo perdono?

 

Es importante entender lo que es el perdón, y lo que no es.

 

1. No es un asunto de emociones. No tenemos que esperar sentir alguna simpatía por el ofensor, para poder perdonarle.

 

2. No es excusar. No significa aprobar lo que hizo esa persona. No necesitamos estar de acuerdo con el ofensor ni tenemos que buscar excusas por su comportamiento.

 

3. No significa confiar nuevamente en el ofensor. Esto es particularmente importante cuando el ofensor no se arrepiente (y esto es muy frecuentemente el caso). El perdón, en este caso, no significa que la relación personal sea restaurada. La relación es restaurada solamente cuando el ofensor se arrepiente sinceramente, pide perdón y hace restitución. Mientras no sucede esto, no hay razón para confiar en él, ni mucho menos tener una relación amistosa con él.

 

4. No es olvidar. Algunos piensan que no han perdonado realmente porque siguen sintiéndose heridos y no pueden olvidar la ofensa. El “olvidar” de Dios significa que El ya no recordará estos pecados “en contra de nosotros” (Salmo 79:8), o sea, ya nos utilizará para acusarnos.

 

5. Perdonar es una decisión. Es un asunto “legal”. Perdonar significa “soltar” o “condonar una deuda”.

 

6. Perdonar es un proceso. Nunca es bueno presionar a alguien: “Perdona no más” – esto lleva solamente a un perdón muy superficial.

En algunos casos tendremos que perdonar muchas veces; cada vez que la herida surge nuevamente en nuestros recuerdos

 


Las mariposas a lo largo de los tiempos han sido algo más que simplemente un símbolo de cambio y belleza, también han sido consideradas como un ente entre el mundo de los mortales y el mundo sobrenatural, una mariposa es un ser que vuela tan ligero y tan libre que difícilmente se nota con facilidad, se dice, también se decía, que los espíritus tomaban forma de mariposas o se apoderaban del cuerpo de una mariposa para volver y ser libres por este mundo, cuidar de quienes amaban y en dados casos se necesite, advertirles sobre acontecimientos futuros.